Este tipo de camas articuladas suelen ser percibidas como camas para personas mayores o con problemas de movilidad. Aunque esta era su función principal, las camas articuladas se han vuelto cada vez mucho más populares entre personas de diferentes edades gracias a los beneficios que aportan para la salud.
Algunas personas, especialmente las que tienen problemas de salud, tener la cabeza elevada al dormir le proporciona una serie de beneficios, mientras que otras se sienten más cómodas con las piernas ligeramente elevadas. Una cama ajustable facilita esta tarea.
¿Qué es una cama articulada?
Una cama articulada es una estructura que permite personalizar la alineación de su cama para que pueda dormir lo mejor posible.
Como en el caso de todas las camas, no todo es el sueño. Estas camas permiten relajarse y levantar la cabeza hasta conseguir un nivel ideal como para leer un libro o usar un portátil de manera cómoda mientras permaneces tumbado.
Y todo esto con tan solo pulsar unos sencillos botones que se encargan de ajustar la cama a tu medida.
¿Por qué elegir una cama ajustable?
Si tienes problemas médicos, las camas articuladas pueden utilizarse por recomendación de tu médico o fisioterapeuta. Sin embargo, aunque estas camas sean ideales para este tipo de personas, su uso no solo se limita a ellos.
Si buscas una experiencia de sueño diferente y totalmente personalizable, una cama articulada puede ser una magnífica opción.
¿Qué beneficios aporta dormir en una cama articulada?
Los tres principales beneficios de las camas cama articuladas son:
Alivio del dolor crónico
Las camas articuladas se pueden adaptar a diferentes posiciones y ángulos en función de tus necesidades. Estos ajustes ayudan a aliviar los dolores crónicos relacionados con la artritis, la ciática y otros problemas relacionados.
La opción de poder seleccionar diferentes posiciones para las piernas y la cabeza elimina la presión sobre las articulaciones doloridas, dándote tiempo para recuperarte mientras duermes y asegurando menos dolor y una mejor movilidad por la mañana.
Mejora de la circulación
Está demostrado que levantar la parte superior de la espalda o la parte inferior del cuerpo mejora la circulación y puede ayudar a la recuperación de los problemas de movilidad.
Por ejemplo, si sufres un edema en las piernas, una cama podría ayudarte a ajustar mejor tu posición cuando duermes. Con tan solo ajustar la cama de forma que tu tronco inferior se sitúe por encima del nivel del corazón durante toda la noche para aliviar un poco el estrés.
Ofrece un sueño más reparador
El sueño es la oportunidad que tiene el cuerpo de recargarse, y cuanto más cómodo te encuentres, mejor será la calidad del sueño. Las camas articuladas ayudan a encontrar la posición perfecta para dormir, permitiendo conciliar el sueño más rápidamente, permanecer dormido durante más tiempo y la posibilidad de despertarse mucho más fresco.
¿Qué ventajas tiene comprar una cama articulada para aquellos que no sufran problemas de salud?
Leer o ver la televisión
Si eres de esas personas a las que le gusta leer antes de irse a dormir, una cama articulada puede ser una magnífica opción para ti. En lugar de sentarte de manera incómoda en una cama normal, las camas articuladas ofrecen una posición en la que el tronco inferior puede colocarse más elevado, eliminando cualquier dolor de cuello o espalda.
Ofrece diferentes posiciones para dormir en pareja
Si tanto tu como tu pareja preferís diferentes posiciones para dormir, las camas articuladas tienen mandos a distancia que pueden ajustar distintos lados de la cama.
Mejora de la circulación
Quienes permanecen durante horas de pie durante su jornada laboral pueden sufrir hinchazones en los pies. Una cama articulada te permite elevar los pies por la noche para reducir hinchazones y ayudar a prevenir la posibilidad de desarrollar afecciones como las venas varicosas.
Comodidad
Una alternativa más saludable y cómoda que una cama normal.
¿Qué medidas de camas articuladas existen?
En el mercado existen distintas medidas de camas articuladas. Las medidas más habituales para este tipo de camas son de 90 cm, 105 cm y 135 cm, siendo la de 105 cm la más recomendada para cualquier persona.
Cuando hablamos de camas dobles, el tamaño recomendado para estas sería de 150 cm de ancho, aunque también se utilizan de manera habitual las de 135 cm.
¿Qué tipo de colchón usar para una cama articulada?
Al igual que escoger la cama articulada que mejor se adapte a tus necesidades, el colchón también es una pieza fundamental. En estos casos, si el colchón que eliges no se ajusta a la cama, la articulación será ineficiente.
Por este motivo, las camas articuladas necesitan un tipo determinado de colchones.
En Colchonerías Nuevo Descanso destacamos dos tipos de colchones que se adaptan perfectamente a cualquier cama articulada:
Colchones de látex
Los colchones de látex están considerados como los que mejor se adaptan a cualquier cama articulada. Están fabricados con un material extra flexible que tiene la capacidad de adaptarse perfectamente a cualquier movimiento del somier.
Colchones viscoelásticos
Los colchones viscoelásticos también poseen una gran adaptabilidad a este tipo de somieres articulados. Al igual que el látex, se trata de un material articularle y flexible que acompaña a la articulación del somier y vuelve a su estado natural con gran facilidad cuando el somier está recto. Además, es un material duradero que no pierde sus cualidades a lo largo de los años.
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