¿Cómo elegir una almohada?

Cuando se trata de elegir la almohada adecuada, no hay un tamaño, forma o material que sirva para todos. 

Es por ello que la mejor forma de elegir la almohada perfecta para ti es determinar qué criterios individuales con más importantes para ti y usar tu instinto para elegir lo que sientas más cómodo y apropiado.

Elegir el relleno 

Existen varias opciones de relleno disponibles para las almohadas. Ninguna es la mejor: todas tienen ventajas e inconvenientes, dependiendo de tus necesidades y preferencias personales. 

¿Sabes qué tipo de rellenos de almohada existen? 

Plumón 

Son almohadas ligeras y blandas. Si te gusta tener un lugar blando para descansar la cabeza por la noche, es muy probable que te guste una almohada de plumón.  

Las almohadas de plumón suelen estar hechas de fibras de ganso o de pato. El plumón de oca suele ser más suave que el de pato, y más caro, aunque también hay variaciones en la suavidad del plumón de oca.  

Las almohadas de plumón están hechas de diferentes combinaciones de plumón, plumas y otros rellenos.

Debes tener en cuenta que las almohadas de "plumón puro" pueden contener plumas y otros rellenos. 

Plumón sintético y relleno de poliéster 

Las almohadas de plumón sintético son más baratas que las de plumón natural hipoalergénico, y hay que sustituirlas con más frecuencia. 

Las almohadas con relleno de poliéster son una opción de almohadas relativamente baratas, en comparación con otros tipos de almohada. Suelen ser de medias a suaves, aunque menos suaves que el plumón. Se aplanan con el tiempo y suelen ser reemplazadas con más frecuencia que otros tipos de almohadas. 

De lana

Este tipo de almohadas son hipoalergénicas y resistentes al moho y a los ácaros del polvo. Las almohadas de lana eliminan la humedad de la cabeza y el cuello y pueden ser eficaces para ayudar a regular la temperatura durante el sueño, manteniéndole caliente en invierno y fresco en verano.  

Suelen ser bastante firmes y muy duraderas.  

Algodón 

Similar a la lana en muchos aspectos, las almohadas de algodón también son naturalmente hipoalergénicas y resistentes a los ácaros y al moho. Las almohadas de algodón suelen ser algo planas y firmes y suelen ser una opción inteligente para personas con alergias y sensibilidades químicas

De látex 

Las almohadas de látex tienden a ser más firmes que las de plumón, pero siguen siendo muy cómodas. Estas almohadas consiguen mantener su forma. El látex es resistente al moho y a los ácaros del polvo.  

Espuma con memoria 

Este tipo de almohadas se han hecho muy populares en los últimos años. La espuma con memoria se adapta a su forma individual. La espuma con memoria, que responde al peso y al calor del cuerpo, se ablanda y se adapta a las líneas de la cabeza, el cuello y los hombros. Además, distribuye el peso de manera uniforme por toda su superficie.  

Estas cualidades la convierten en una opción popular para personas con dolor de cabeza y cuello, o con puntos de presión que causan molestias durante el sueño.  

La espuma viscoelástica retiene el calor, lo que puede provocar molestias y sudoración. Las almohadas de espuma viscoelástica de alta calidad se fabrican hoy en día con ventilación integrada en la almohada, pero sigue siendo un material que retiene el calor.  

Estas almohadas también pueden desprender olores químicos, sobre todo cuando son nuevas, que resultan molestos para algunas personas. 

Peso del relleno 

Las almohadas de plumón y las sintéticas son opciones ligeras, mientras que la espuma con memoria y el látex son más pesadas. El peso de la almohada es una cuestión de preferencias. Si te gusta moldear y mover tu almohada mientras descansas, una almohada más ligera puede ser una mejor opción. 

Calidad del relleno 

En todos los tipos de almohada, la calidad es importante para la comodidad, el apoyo y la durabilidad. Todo esto se reflejará en el precio.  

Una vez que hayas decidido qué tipo de relleno de almohada es el que más te conviene, selecciona la almohada de mayor calidad que te permita tu presupuesto.  

Recuerda que pasarás miles de horas con esta ella a lo largo de tu vida. 

Tamaño

Para la mayoría de las personas, una almohada de tamaño estándar es lo suficientemente grande.  

Si prefieres una almohada más grande, no hay problema, siempre que puedas mantener tu postura de sueño alineada.  

El grosor o la delgadez de la almohada debe permitirte dormir con la cabeza, el cuello y los hombros alineados con la columna vertebral, además de proporcionarte comodidad.  

Asegúrate de que la funda de la almohada y el cojín se ajustan correctamente. No metas una almohada grande en una funda de tamaño inferior, ni dejes que una almohada de tamaño estándar nade en una funda extragrande. 

También se fabrican almohadas con formas especiales que proporcionan un apoyo y una estabilidad adicionales para la cabeza y el cuello.  

Tela 

Utiliza tejidos naturales y transpirables para cubrir tus almohadas.  

Las fundas de almohada ayudan a prolongar la vida de la almohada, protegiéndola contra las manchas y el sudor. Las almohadas decorativas quedan muy bien en la cama, pero deben quitarse antes de dormir. 

Química 

Los materiales sintéticos como la espuma con memoria y el poliéster se fabrican mediante procesos químicos, y muchas almohadas se someten a tratamientos antimicrobianos.  

Conoce la química con la que está fabricada tu almohada, esté dispuesto a invertir en un producto bien hecho y tenga en cuenta sus propias alergias y sensibilidades químicas a la hora de elegir un tipo de almohada.

Estas son algunas pautas que debes analizar antes de comprar una almohada. ¿Tienes más dudas a la hora de elegir la almohada que mejor se adapte a tu forma de dormir? Contacta con nosotros a través de nuestro formulario de contacto. O si lo prefieres, puedes hacerlo a través de WhatsApp o en el 958 261 154¿No eres cliente? No importa. 

No te cortes, contacta con nosotros, resolveremos todas tus dudas.

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